Graaciias!! :)

Chicas en primer lugar, queria agradeceros que esteis leyendo la novela y deciros que me haceis muy feliz al ver que alguien aprecia mi trabajo. Muchas gracias a todas y en segundo lugar, me gustaria pediros un favor, ¿podríais recomendarme? Os lo agradecería muchisimo, y por favor, siento ser pesada con esto pero me gustaria saber vuestra opinion, la de cada una, así la novela podría mejorar. Si no me comentais, yo no sé que os gustaría que pasase. Pero aún así repito, muchas gracias. De verdad que os quiero hermanas!! :) ♥

miércoles, 29 de febrero de 2012

Cap. 48 "Olvidate de Justin Bieber. Ahora la que importas eres tu."

En el capítulo anterior...



Miro la hora. Las 4:38 de la madrugada. Estoy cansado pero aguanto por ella, todavía no hemos recibido ninguna noticia. Espero que eso sea porque está bien...Por fin sale alguien de la habitación e instantaneamente todos se despiertan y se levantan de la silla exaltados, al igual que yo.
-¿Como está?-pregunto con mucho miedo a oír una mala noticia.
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-Todavía no ha despertado-comienza diciendo el doctor mientras miraba una cartilla llena de papeles en la mano-Tiene pequeños daños cerebrales. De momento no hemos podido comprobar como reaccionará ante esos daños y puede que tenga algún problema, el golpe ha sido realmente fuerte.-comencé a asustarme-Pero hay un porcentaje estimadamente alto de probabilidad en el que su organismo consiga reparar los daños solo. 
-¿Cree que puede ser ese su caso?-pregunta mi madre.
-No lo sé...Sinceramente...Este en el que se encuentra su hija puede ser uno de los más peligrosos. El golpe a afectado gran parte de su cráneo en una zona muy débil.-¿Su hija? ¿Se ha pensado que es su hija? En fin...-De todas formas, hacemos todo cuanto está en nuestras manos.
-Muchas gracias, doctor.-agradeció Carmen.
Y éste se fue.
-¡Espere!-grité.
-¿Que ocurre?-preguntó parando y girándose para verme.
-¿Puedo entrar a verla?-me miró indeciso, pero rogué con la mirada, por lo que aceptó.-Muchas gracias.
-No la molestes.
-Tranquilo.
Pasé a la habitación, silenciosamente. Solo se oía el molesto aparato que marcaba su ritmo cardíaco "piiii...piii...piii...". Demasiado molesto e inquietante. Ella estaba tumbada en una cama, tapada por unas sábanas blancas. Tenía una venda que cubría su frente y miles de chismes adheridos al cuerpo. ¿Tan grave podía llegar a ser una caída en el baño? Por lo visto si...Pero no podía pensar que eso puede acabar con una vida tan importante en la mía. Me acerqué a la cama, y contemplé la imagen. No era demasiado agradable verla ahí...así. De esa manera. Pero era ella, y tenía que estar allí, apoyandola para que se pusiese bien y pudiesemos pasar estos días juntos, aunque a mí no me quedaba mucho. En dos o tres días tendría que irme a Nueva York , donde comenzaría la gira de "Belive" y donde cantaría en el Madison Scare Garden de nuevo. Pero no podía disfrutar sabiendo que ella se está muriendo en un hospital. Dejé los pensamientos de lado y acerqué una silla que había y me senté a su lado. La estuve observando durante un cuarto de hora más o menos, pensando angustiado mientras la miraba, pero el sueño pudo conmigo y finalmente me quedé dormido con la cabeza apoyada en su pierna.


(...)

-Justin...Justin...Despierta...-oí mientras alguien me daba toquecitos en el hombro.
Abrí los ojos, con la esperanza de que fuese Silvia, pero no. Era mi madre. Estaban Carmen y ella mirándome. Aquel rayo de esperanza se esfumó al instante.
-Tienes que desayunar algo.
-¿Y ella?
-De Silvia ya se ocupan los médicos. Luego volvemos, tenemos que dejarles trabajar.
-Pero yo no quiero irm...-paré de hablar. El corazón me dio un vuelco al ver que Silvia estaba moviendo los dedos de la mano. Era la primera vez que se movía en toda la noche. Todos nos quedamos atentos en sus movimientos. Carmen fue a llamar al doctor rapidamente y mi madre y yo esperabamos a que despertase.
Lentamente fue movimiendo la cabeza, mientras tanto los demás entraron en la habitación corriendo al enterarse. Abrió los ojos finalmente y pude volver a admirar aquello que fue lo primero que me cautivo, sus preciosos ojos azules como diamantes. Nos miró a todos sorprendida. Parecía que acabase de volver de otro mundo, su expresión era neutra. 


~Silvia~


Desperté. Me sentía rara, tenía un vacío dentro. Realmente no caía por qué. Cuando me quise dar cuenta, Carmen, Fani, Inma, Kenny, Pattie y Justin me observaban esperando una respuesta por mi parte. Me quise poner en pie, pero no sentía la parte inferior de mi cuerpo. De cintura para abajo no tenía cuerpo, o por lo menos no lo parecía. Era como si solo pudiese controlar las manos y la cabeza. Lo demás se mantenía quieto por mucho que lo intentara. Justin saltó para abrazarme y una lágrima comenzó a recorrer mi mejilla al darme cuenta de que me había quedado paralítica. No, no puede ser. Recuerdo que me caí al salir de la ducha pero no podía haberme quedado paralítica. Es imposible....
-Ya has vuelto, sabía que el doctor no tenía razón.-dijo mientras seguía abrazándome, seguido por los demás, que también lo hicieron.
-Justin ayúdame...-rogué desesperada al ver que nadie me comprendía.
Se separaron de mi y yo me aferré a él.
-¿Qu-qué pasa?-dijo asustado al ver también la lagrima.
-Necesito que me ayudes, no puedo mover los pies.-dije llorando ya.
Llegó el doctor justo entonces.
-¿Ya despertó?
-Tranquila, si puedes. Solo...solo tienes que hacerlo como lo has hecho hasta ahora.
-No, no puedo. ¡Justin ayudame!-dije llorando con mas intensidad perdiendo los nervios y el control por la situación agarrando su camiseta con fuerza.
-No puedo ayudarte...-dijo llenandosele los ojos de lágrimas.
-Pero....¡yo quiero moverme!-dije desesperada.
-Calmese señorita...ya está. Tranquilicese.-decía el doctor mientras apartaba a Justin de mí y les pedía a todos que saliesen de la habitación.

~Justin~

-Mamá, es mi culpa... ¡Está paralizada por mi culpa!-dije practicamente llorando.
-¡Justin! ¡No digas eso, no es tu culpa! Se pondrá bien. Verás como solo es momentáneo. Se le pasará.
-No, mamá...no se le pasará. No lo comprendes. Si a ella le pasa algo yo...-la abracé. No podía creerlo, era como si el mundo se me viniese encima. Ya nada me importaba. 
Salío el médico en un par de minutos después.
-¿Es parálisis?-preguntó Fani, que apenas había hablado debido a la tensión del momento.
-Me temo que si. Uno de los nervios del aparato locomotor ha sido afectado, pero la buena noticia es que no es permanente. Lo más seguro es que con un poco de esfuerzo diario consiga volver a la normalidad.
-¿Cuanto tiempo cree que tardará?-preguntó Carmen.
-Con ejercicio diario un mes puede ser suficiente. Hoy la tendremos aquí, pero por la noche se la podrán llevar a casa.
-Muchas gracias doctor.-dijo mi madre.
Y éste se fue por uno de los pasillos.
-¿Temporal?-dudó Inma.-Espero que sea así...vaya vacaciones que está teniendo la pobre...

(...)

Son ya las 20:23. Carmen a mandado a Fani y a Inma a casa no sé exactamente por qué. Kenny se fue a hacerle unos recados importantes a mi madre y ahora nos encontramos Carmen, mi madre y yo en frente de la habitacion esperando a que salgan una enfermera y Silvia para irnos a casa. No sé cómo llevará lo de su parálisis porque no me han dejado entrar en su habitación en todo el día, aunque no creo que sea muy bien. Al fin, sale en una silla de ruedas dirigida por la enfermera. Lo primero que hace es fijar la vista en mí, yo le sonrió intentando lidiar la situación, pero ella baja la cabeza expresando su dolor en silencio. Carmen y mi madre hablan con la enfermera mientras me acerco a ella e intento ser lo más normal posible.
-¿Estas bien?- pregunta errónea. ¿Qué tipo persona le pregunta eso a alguien que se acaba de quedar paralítico?
No me contesta, supongo porque la respuesta es ovbia.
-Te pondrás bien. Ya lo verás...-y la beso de la mejor manera que puedo. Esta vez consigo que sonría.
-Eso espero...no quiero que Justin Bieber vaya por ahí con una novia que no puede ni andar.
-Olvidate de Justin Bieber. Ahora la que importas eres tu. 
-No te lo crees ni tu. Tienes un Ego más grande que tu casa. Y eso ya es decir...-dijo riendo.
-¡Oye! jaja Que tontita eres...-le dije cariñosamente.
-No más que tu.
-¿Ni siquiera cuando te pasan estás cosas puedes dejar de vacilarme?
-Espera que me lo piense...Ahh si. ¡No! Jajajaja
-Te quiero.
-Yo más.
-Seguro que yo más.
-Vale, tu ganas.-dijo.
-Vamonos chicos.-dijo Carmen acercándose a nosotros.-Ya me han dicho que estás mejor...
-Bueno...intento pensar positivamente. Dentro de poco volveré a caminar y...No pienso volver a pasarme los dias llorando como hoy.
-...Haces bien. Ya sabes que debes ejercicio todos los días.-dice mamá.
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Ueee!! Hoy he escrito este capítulo para vosotras!! HOY. Que tengo examen. Ya sabeis. Es algo normal en mi jiji. Bueno espero que os guste y ya sabeis lo que viene ahora no? COMENTAD jaja Os qeerrooo!

4 comentarios:

  1. me encanto el vapitulo q pena de silvia pero bolvera a camirar siguelaaaaaaaaa

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  2. ya puedes seguir escribiendo cuando acabes de estudiar! jo pobre silvia :( haber si puede caminar pronto!

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  3. LÁLÁLÁLÁLÁLÁ. . . . .No puedoo maaaaaaaaaaaaaaaas tu crees que puedes matarme?Así sin mas? ehhhh???
    No lo etiendo de verdad... *__* jaja el capítulo esta tremendamente genial y espero que hoy el b-day de Justin subas. . . ( : Te quiero y no te comento mas por que son las 8:20 de la mañana y todavia no me has avisado y vamos a llegar tarde al insti. . . jajajaj (LL

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  4. Olaaaaaa!! Nueva seguidora para siempre!!:D:D:D
    Me acabo de leer toda toda toda la novela y creeme ke no me arrepiento :D
    Espero que Silvia pueda volver a andar :S
    Publica pronto porfiis!!
    Un besito linda!:D

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Por favor mis amores, que con un pequeño comentario me haceis muy feliz :)